#ConflictMinerals 2017: estado de la cuestión
De acuerdo con el informe de Enough Project publicado en noviembre de 2017, que valora si las empresas han hecho mejoras en el uso de minerales libres de conflicto y no vinculados a abusos de derechos humanos, sí que ha habido adelantos.
Este informe, después de investigar las 20 empresas más importantes del sector de la joyería y la electrónica de consumo, concluye que Apple, Alphabet (Google), HP, Microsoft e Intel son las que demuestran estar más comprometidas con la adopción de medidas de debida diligencia en cuanto al abastecimiento responsable de minerales. En cambio, Walmart, Sears y Neiman Marcus son las que menos combaten el comercio de minerales provenientes de la República Democrática del Congo.
El informe establece unos criterios básicos, como participar en auditorías o apoyar a comunidades mineras artesanales del este de la RDC, a partir de los cuales clasifica las empresas en un ranking.
En la industria de la joyería, donde el sector está menos avanzado respecto a la mejora de la transparencia de la cadena de suministro, las empresas mejor valoradas son Signet Jewelers y Tiffany & Co, que han considerado importante hacer informes de debida diligencia y mantener y reforzar la implementación de la ley Dodd-Frank 1502.
Esta lista nos indica que cada vez hay más apoyo al comercio de minerales libres de conflicto. Para afirmar esto, el informe se basa en criterios como la mejora de los programas de debida diligencia de las empresas, los adelantos en el desarrollo e implementación de procesos de gestión de riesgos y la publicidad en las prácticas de diligencia de las empresas más allá de la publicación de un informe anual.
El informe, pero, también considera que queda mucho camino por recorrer, y en este sentido apunta directamente a tres retos que hay que mantener presentes: el primero hace referencia al comercio de oro, que es todavía una fuente de financiación para los grupos armados del este de la RDC. Por lo tanto, hay que seguir haciendo esfuerzos para mejorar su trazabilidad para conseguir un suministro de oro libre de conflicto, especialmente el proveniente de minas artesanales. El segundo reto es el de apoyar a las comunidades mineras del este de la RDC para mejorar su acceso a mercados oficiales y potenciar medios de subsistencia alternativos para romper su dependencia del comercio de minerales. El tercer reto es el relacionado con el contrabando y el tráfico de oro en las fronteras de la RDC con los países vecinos. En este sentido, el informe alienta las empresas a hacer incidencia política ante las autoridades congoleñas para que mejoren el estado de derecho, la seguridad y la contabilidad del Estado. Además, recuerda que no sólo las compañías transnacionales son responsables de lograr estos retos: los consumidores y los inversores también tienen responsabilidad para hacer presión.
Por último, Enough Project hace una serie de recomendaciones:
- Reforzar y mejorar la publicidad de los informes periódicos sobre la debida diligencia en la cadena de suministro por parte de las empresas que utilizan minerales 3TG. Todas las empresas, sean públicas, privadas o de cualquier nacionalidad, tendrían que implementar programas de diligencia de acuerdo con la Guía de la OCDE, informando públicamente sobre sus prácticas.
- Mantener la debida diligencia de manera permanente, no sólo puntualmente. Las empresas tienen que considerar este compromiso como un objetivo con vocación de permanencia y no como el cumplimiento de un requisito de transparencia pública que se exige una vez al año en la publicación del informe anual. Además, esta es la manera que las prácticas de abastecimiento responsable sean cada año más fáciles y menos caras.
- Participar en iniciativas multilaterales para apoyar a proyectos progresivos. Teniendo en cuenta que las leyes que obligan a las empresas a informar sobre la transparencia de sus prácticas están en constante amenaza, es importante que las compañías se unan entre ellas y también con otros actores para asegurar la permanencia de estas obligaciones. Por ejemplo, la Asociación Europea para Minerales Responsables (EPRM) o la Alianza Pública/Privada para el Comercio de Minerales Responsables (PPA).
- Apoyar a las comunidades mineras artesanales con el objetivo de garantizar que la población tenga acceso al mercado legal de minerales, y también mejorar sus condiciones de trabajo (equipamiento seguro, salarios dignos, oportunidades de formación, asesoramiento legal, etc.). En definitiva, invertir en una mejora de su calidad de vida.
- Subir el listón. Las empresas tendrían que aplicar un umbral de diligencia más estricto que el que exige la normativa. También mejorar la comunicación entre las compañías y las instituciones financieras. Estas tendrían que compartir con sus bancos cualquier información relevante relacionada con su cadena de suministro, para que estos tengan la posibilidad de investigar posibles riesgos y oportunidades de intervención.
Desde Justícia i Pau y la campaña #ConflictMinerals celebramos los pequeños adelantos que las empresas van haciendo respecto a la debida diligencia y el abastecimiento responsable, pero hagamos nuestras las palabras de Enough Project y no olvidemos que todavía queda mucho camino por recorrer, y que hay que continuar trabajando para conseguir el suministro de todas las empresas de minerales libres de conflicto.